La cantera en restauración “Taralpe” (Alhaurín de la Torre, Málaga) perteneciente a la compañía Financiera y Minera (FYM), recibió el pasado 10 de junio el certificado ISO 14000 por su buena gestión medioambiental, otorgado por la empresa AENOR. Esta obtención supone un avance más en la continua apuesta de FYM por un desarrollo responsable y sostenible, en línea con la política ambiental de Italcementi Group.

Al acto de entrega han asistido el alcalde de Alhaurín de la Torre, Joaquín Villanova; el director de Certificación AENOR en Andalucía, Antonio Pérez Carreño; el director de Áridos Sur de FYM, Germán Carrasco; y el director de Materiales de FYM, José Uriol.

Los Sistemas de Gestión Ambiental según la Norma UNE-EN-ISO 14000 giran en torno a unos ejes fundamentales como son la mejora continua, concretada en objetivos anuales, la prevención de la contaminación, el cumplimiento de la normativa vigente, la formación y la comunicación.
 
Esta herramienta de trabajo, cuya implantación es voluntaria, facilita el seguimiento y control de los aspectos ambientales y ayuda a mejorar de forma continua el desempeño ambiental.
 
La ISO 14000 es una norma de ámbito y reconocimiento internacional que establece los requisitos que debe cumplir un Sistema de Gestión Ambiental para que el mismo sea válido. Su grado de implantación y eficacia queda avalado, entre otros factores, por la realización de auditorías anuales.
 
La cantera en restauración “Taralpe” es la segunda de FYM que ha recibido esta certificación. La cantera La Utrera, situada en Casares (Málaga), la obtuvo en diciembre de 2003, siendo en su momento pionera en el sector, tanto en Andalucía como en España.    
 
Numerosos premios y reconocimientos
Además de la reciente certificación obtenida, la cantera en restauración de Alhaurín de la Torre suma otros premios en su historial: Primer Premio Nacional de Desarrollo Sostenible en la categoría Social-Seguridad y Salud en 2004, otorgado por ANEFA (Asociación Nacional de Empresarios Fabricantes de Áridos); y en 2005, el Primer Premio Europeo de Desarrollo Sostenible en la categoría Buenas prácticas en Seguridad y Salud, y el Premio especial del jurado a la participación de los trabajadores, ambos entregados por la UEPG (Asociación Europea de Productores de Áridos).